NI DIOS NI DIABLO, NI CIELO NI NADA

Le tememos a la muerte e inventamos vidas celestiales, en nuestra locura hemos hecho una mística de resurrecciones, hijos sometidos a torturas y pariciones sin coito.

Estamos todos absolutamente locos, dementes y maniatados a la idea de un ser superior que de existir, deberíamos eliminar.

Un papado cubierto de oro, protestantes fanáticos drogadictos consume biblias y lava cerebros que recorren las calles, alienados hablando de Jesús, de su venida, del apocalipsis y levantando un libro que nadie sabe si no fue escrito por unos farsantes.

Todo debe estar escrito, testamentado, regido, prohibido y mientras tanto los soldados rezan antes de matar a sus semejantes y las armas son bendecidas por curas pedofílicos y los futuros explotadores de las clases obreras van a colegios católicos.

Testigos de Jehobá ostentando su superioridad, mormones agentes de la Cia y cuanta escoria que rejunta pobres e ignorantes para inyectarles la droga del cristianismo.



MIEDO, SIEMPRE MIEDO, CASTIGO, REDENCIÓN, CONFECIÓN...UNA PORQUERÍA.