Por: Darío Valle Risoto
Ayer falté a trabajar, me cagaba parado, perdonen pero comí como un tarado Mandarinas a las once de la noche y soñé que me hacía, por suerte estaba cerca del baño y llegué...Fiuuuuuú, ¡Se imaginan las horas de terapia diciéndole a mi analista: ___Doctor, anoche me cagué encima en la cama.
Hoy el trabajo normal, claro que el fin de semana me llegó la cuenta de la Luz, 900 morlacos y poco más todo porque tengo la mala idea de calentarme en invierno con la estufa eléctrica, ya quemé hasta la silla de ruedas de la nona en la salamandra y no tengo más muebles que prender, tampoco los gases me dan para tanto por más que coma boniatos, es broma.
Y en pleno trabajo Varela le trae los suplementos Ovación a Emmanuelle para que vea a sus ídolos del fobal, yo solo miro la parte de atrás donde hay algunas niñas de esas para soñar despiertos y me encuentro con...
Nicole Scherzinger... ¡Mi dios!, ¡Que morocha! Y yo con más seca sexual que Jesús de Nazaret que creo que después de todo le arrimaba a María Magdalena (Me contó Judas).
Uno ya no gana para disgustos porque duele que mujeres de esa fisonomía anden por allí cantando en bandas de rock y siendo novias de tenistas llenos de plata cuando uno ni siquiera una planchita de esas que hablan como neanderthales le dan bola.
Me anoté en Locosporunamina.com y se me ofrecieron cuatro viejas de 50 años, un travestí tartamudo y un enano gay. ¡No hay derecho carajo!
Así que ando por Montevideo enamorándome en el ómnibus y buscando en Internet todas esas mujeres que a menos que me haga musulmán y me vuele el culo como hombre bomba y vaya al paraíso de Alá, nunca veré.
A Propósito de culos, ya me curé de la diarrea.
Hoy el trabajo normal, claro que el fin de semana me llegó la cuenta de la Luz, 900 morlacos y poco más todo porque tengo la mala idea de calentarme en invierno con la estufa eléctrica, ya quemé hasta la silla de ruedas de la nona en la salamandra y no tengo más muebles que prender, tampoco los gases me dan para tanto por más que coma boniatos, es broma.
Y en pleno trabajo Varela le trae los suplementos Ovación a Emmanuelle para que vea a sus ídolos del fobal, yo solo miro la parte de atrás donde hay algunas niñas de esas para soñar despiertos y me encuentro con...
Nicole Scherzinger... ¡Mi dios!, ¡Que morocha! Y yo con más seca sexual que Jesús de Nazaret que creo que después de todo le arrimaba a María Magdalena (Me contó Judas).
Uno ya no gana para disgustos porque duele que mujeres de esa fisonomía anden por allí cantando en bandas de rock y siendo novias de tenistas llenos de plata cuando uno ni siquiera una planchita de esas que hablan como neanderthales le dan bola.
Me anoté en Locosporunamina.com y se me ofrecieron cuatro viejas de 50 años, un travestí tartamudo y un enano gay. ¡No hay derecho carajo!
Así que ando por Montevideo enamorándome en el ómnibus y buscando en Internet todas esas mujeres que a menos que me haga musulmán y me vuele el culo como hombre bomba y vaya al paraíso de Alá, nunca veré.
A Propósito de culos, ya me curé de la diarrea.
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