Por: Darío Valle Risoto
Disculpen no es que uno ande de negativo pero creo que debo ser sincero cuando comento películas o cualquier cosa, siempre desde mi absoluta visión personal lo que no quiere decir de ninguna manera que sea esta la única forma de ver algo. Ustedes pueden pensar que una obra es superbuena cuando yo creo todo lo contrario y viceversa.
Debo decirles entonces que la película Tekken me resultó bastante aburrida y esto tratándose de personajes tan interesantes como los del universo de este video juego de peleas es más que decepcionante. Tekken fue la gran pegada de la consola Playstation para competir con clásicos absolutos como Mortal Kombat y Street Fighter, indudablemente tomaba características de ambos y no fue raro encontrar demasiadas similitudes entre algunos personajes de esta con las mencionadas. Aún así los tres primeros tekkens fueron absolutamente fagocitados por quién les habla y todavía los tengo con mi querida consola gris.
Se que hubo muchos más pero hasta aquí llegó mi economía, aún así aparecen en el filme varias criaturas como: Heichachi que está pésimamente caracterizado por un reconocido actor asiático, la calentona: Nina, mi preferida en el juego pero que en el filme no tiene mayor importancia y Yoshimitsu que si es como en el juego aunque tampoco aparece para significar algo demasiado relevante.
Faltan muchos y la historia es débil por donde se la mire, ni cerca se encuentra de las versiones para cine de Mortal Kombat aunque supera al bodrio de Street Fighter de hace unos años con Jean Cloude como Guille (¡Puaj!).
Hay personajes del Tekken que creo yo nunca podrían haber faltado como la chinita o el tipo con cabeza de Leopardo, pero en fin…, como mencioné con el comentario del Príncipe de Persia, a veces es muy difícil trasladar un video juego al cine y ni hablar si se trata de uno de piñas y patadas.
Disculpen no es que uno ande de negativo pero creo que debo ser sincero cuando comento películas o cualquier cosa, siempre desde mi absoluta visión personal lo que no quiere decir de ninguna manera que sea esta la única forma de ver algo. Ustedes pueden pensar que una obra es superbuena cuando yo creo todo lo contrario y viceversa.
Debo decirles entonces que la película Tekken me resultó bastante aburrida y esto tratándose de personajes tan interesantes como los del universo de este video juego de peleas es más que decepcionante. Tekken fue la gran pegada de la consola Playstation para competir con clásicos absolutos como Mortal Kombat y Street Fighter, indudablemente tomaba características de ambos y no fue raro encontrar demasiadas similitudes entre algunos personajes de esta con las mencionadas. Aún así los tres primeros tekkens fueron absolutamente fagocitados por quién les habla y todavía los tengo con mi querida consola gris.
Se que hubo muchos más pero hasta aquí llegó mi economía, aún así aparecen en el filme varias criaturas como: Heichachi que está pésimamente caracterizado por un reconocido actor asiático, la calentona: Nina, mi preferida en el juego pero que en el filme no tiene mayor importancia y Yoshimitsu que si es como en el juego aunque tampoco aparece para significar algo demasiado relevante.
Faltan muchos y la historia es débil por donde se la mire, ni cerca se encuentra de las versiones para cine de Mortal Kombat aunque supera al bodrio de Street Fighter de hace unos años con Jean Cloude como Guille (¡Puaj!).
Hay personajes del Tekken que creo yo nunca podrían haber faltado como la chinita o el tipo con cabeza de Leopardo, pero en fin…, como mencioné con el comentario del Príncipe de Persia, a veces es muy difícil trasladar un video juego al cine y ni hablar si se trata de uno de piñas y patadas.
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