Por: Darío Valle Risoto
Creo que irremediablemente el cine de comedias usamericano está cayendo en un jodido pozo creativo que no da signos de solucionarse, el ejemplo de esto es la última película protagonizada por el genial actor Steve Carrel.
Vamos a entendernos, si se trata de hacernos reír debemos comprender que el humor usamericano es mucho más condescendiente que el latino, ellos tiene mayor facilidad para lograr la carcajada fácil y nosotros, al menos los uruguayos, tenemos cierta dureza frente a situaciones como las que pretenden ser solamente payasescas y nada más.
Por lo tanto un filme que se centra en una cena donde un pretendiente a un mejor cargo de una oficina debe llevar al tonto más tonto que se encuentre no me parece que sea suficiente para centrar toda la historia y sin embargo así es, al punto que en mitad de la película me dormí terrible siesta y tuve que rebobinar para verla de nuevo.
De todas maneras es una historia bastante llevadera (Si no se duermen) pero por momentos cae en escenas por demás absurdas y sin un ápice de humor como aquella donde el hombre que pretende dominar la mente de nuestro protagonista intenta someterlo con miradas profundas y frases pelotudas ¿?.
¿Será que me estoy volviendo un viejo amargado? O probablemente y tratando de pensar mejor es que uno ya ha visto tanto cine y sobre todo de grandes comediantes que hoy por hoy se resiste a este tipo de comedias muy livianas y absolutamente ingenuas.
Steve Carrel se destacó y mucho con esa gran película que fue “Virgen a los cuarenta” y alguna más por allí pero esta me sonó a mal elección para uno de los mejores actores del género de hoy día.
Vamos a entendernos, si se trata de hacernos reír debemos comprender que el humor usamericano es mucho más condescendiente que el latino, ellos tiene mayor facilidad para lograr la carcajada fácil y nosotros, al menos los uruguayos, tenemos cierta dureza frente a situaciones como las que pretenden ser solamente payasescas y nada más.
Por lo tanto un filme que se centra en una cena donde un pretendiente a un mejor cargo de una oficina debe llevar al tonto más tonto que se encuentre no me parece que sea suficiente para centrar toda la historia y sin embargo así es, al punto que en mitad de la película me dormí terrible siesta y tuve que rebobinar para verla de nuevo.
De todas maneras es una historia bastante llevadera (Si no se duermen) pero por momentos cae en escenas por demás absurdas y sin un ápice de humor como aquella donde el hombre que pretende dominar la mente de nuestro protagonista intenta someterlo con miradas profundas y frases pelotudas ¿?.
¿Será que me estoy volviendo un viejo amargado? O probablemente y tratando de pensar mejor es que uno ya ha visto tanto cine y sobre todo de grandes comediantes que hoy por hoy se resiste a este tipo de comedias muy livianas y absolutamente ingenuas.
Steve Carrel se destacó y mucho con esa gran película que fue “Virgen a los cuarenta” y alguna más por allí pero esta me sonó a mal elección para uno de los mejores actores del género de hoy día.
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