Por: Darío Valle Risoto
Esta es la primera parte de una película partida al medio vaya a saber con que motivos comerciales, la segunda se llamará: Che: El Guerrillero y se cree que será estrenada en un par de meses. Como toda película basada en hechos reales podremos discrepar con la visión del director pero luego de verla se me ocurre que el guión es muy cauteloso para seguir los momentos cumbres en la vida del personaje más importante en el mundo del siglo veinte y tal vez uno de los más emblemáticos de toda la historia humana. El guión parte de los escritos del propio Ernesto Guevara durante la revolución Cubana que derrocó al dictador Fulgencio Batista que regenteaba el prostíbulo mas grande de los Estados Unidos en el Caribe, anécdotas mediante siempre quedará en la ideología del espectador juzgar los hechos que llevaron al pueblo cubano a una auténtica revolución en contra de la opresión de los políticos, militares y terratenientes, también será responsabilidad de nosotros ponernos a ver como durante la guerra de guerrillas los hombres deben actuar de acuerdo a su sentido de la moral y la justicia. Pero yo no puedo ver nada sobre el Che Guevara sin sentirme profundamente conmovido y avergonzado por estos tiempos que nos han tocado vivir.
En el aspecto puramente cinematografico estamos sin lugar a dudas frente a la mejor película sobre el CHE de todos los tiempos, he visto infinidad de estas hechas con diversas visiones no siempre objetivas, pero se me ocurre: ¿Es posible una lectura objetiva del Che Guevara?, No lo creo. Benicio del Toro hace una muy buena interpretación y por suerte en esta primera parte la historia no cae en ningún momento en los clásicos momentos sentimentales conque nos atacan muchas biopics. Es raro que en este momento que está pasando el mundo donde definitivamente estamos asistiendo a la debacle estructural del sistema capitalista aparezca este film que dirige Sodenberg, tal vez haya que mirar nuestras realidades cotidianas y evaluar cuanto hemos prostituido nuestras libertades personales en nombre del plástico que nos rodea.
No lo sé, como anarquista este comunista argentino que refundó al hombre sobre el sentido de la solidaridad, el compromiso y sobretodo el amor al prójimo siempre me conmoverá.
No lo sé, como anarquista este comunista argentino que refundó al hombre sobre el sentido de la solidaridad, el compromiso y sobretodo el amor al prójimo siempre me conmoverá.
Los reales: Ernesto y Fidel
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