Por: Darío Valle Risoto
Apartate de la locura inalcanzable
la de los hombres derechos
y las mujeres morales.
Sumérgete en la espuma de tu libertad
desnuda o cubierta de sonrisas.
No te lastimes esperando el sol
allí donde reina la oscuridad,
el mundo está repleto de necios
que creen en un dios hecho
a su imagen y semejanza.
Pero nada saben de la vida real
los que creen que todo está escrito
y olvidan la magia que se esconde
en tu cuerpo de niña ausente.
Explora los confines de tu mente pura
guiándote solo con tus instintos
y no abraces mas de esa inútil fe
que vuelve a los hombres ciegos
y a sus mujeres esclavas sordas.
Recorre otros mundos, fabrícalos
con el cáliz mágico de tu vientre
y dale la bienvenida a los días felices.
la de los hombres derechos
y las mujeres morales.
Sumérgete en la espuma de tu libertad
desnuda o cubierta de sonrisas.
No te lastimes esperando el sol
allí donde reina la oscuridad,
el mundo está repleto de necios
que creen en un dios hecho
a su imagen y semejanza.
Pero nada saben de la vida real
los que creen que todo está escrito
y olvidan la magia que se esconde
en tu cuerpo de niña ausente.
Explora los confines de tu mente pura
guiándote solo con tus instintos
y no abraces mas de esa inútil fe
que vuelve a los hombres ciegos
y a sus mujeres esclavas sordas.
Recorre otros mundos, fabrícalos
con el cáliz mágico de tu vientre
y dale la bienvenida a los días felices.
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