73: Soy un Tango
Cacho Castaña
Alguien me comentaba si no iba a contener discos de tangos en esta lista y la verdad que la mayoría de los tangos que aquilato los he conocido independientemente de sus discos de origen o los tengo en compilados de los tantos que abundan hoy día. Felizmente.
En este caso me voy a referir al disco “Soy un tango” del archiconocido compositor y cantante argentino Cacho Castaña. Por si mismo este trabajo tiene su resalte en dos temas que pasaron a la historia: Garganta con arena y Café la humedad. Indudablemente tiene otras buenas canciones a excepción de la paupérrima: “Ojala que no puedas” pero me imagino que está aquí para contentar al público de su faceta melódica que es donde este cantante se ha destacado mayoritariamente con monstruosidades de todo tipo.
Cacho Castaña es un personaje de la épica porteña contemporáneo pero que puede fácilmente trasladarse a cada rincón de una Buenos Aires donde conviven la canción con el ritmo frenético de sus habitantes, este compositor ha sabido nos guste o no trasladar a los argentinos todo su espíritu en sus canciones y pocos como él se han mantenido muchos años en un sitial de importancia. Dos tangos como los mencionados nos lo ponen del lado bueno de la música por más que encontremos que durante su larga trayectoria se haya paseado por lugares no siempre bien aceptados por quién suscribe esto.
Un disco donde encontramos también “Que tango hay que cantar” o el del título, toda una declaración rioplatense, si se me permite.
Para finalizar, le compré este disco a Julia y por suerte cuando se fue a España me lo dejó.
Cacho Castaña
Por: Darío Valle Risoto
Alguien me comentaba si no iba a contener discos de tangos en esta lista y la verdad que la mayoría de los tangos que aquilato los he conocido independientemente de sus discos de origen o los tengo en compilados de los tantos que abundan hoy día. Felizmente.
En este caso me voy a referir al disco “Soy un tango” del archiconocido compositor y cantante argentino Cacho Castaña. Por si mismo este trabajo tiene su resalte en dos temas que pasaron a la historia: Garganta con arena y Café la humedad. Indudablemente tiene otras buenas canciones a excepción de la paupérrima: “Ojala que no puedas” pero me imagino que está aquí para contentar al público de su faceta melódica que es donde este cantante se ha destacado mayoritariamente con monstruosidades de todo tipo.
Cacho Castaña es un personaje de la épica porteña contemporáneo pero que puede fácilmente trasladarse a cada rincón de una Buenos Aires donde conviven la canción con el ritmo frenético de sus habitantes, este compositor ha sabido nos guste o no trasladar a los argentinos todo su espíritu en sus canciones y pocos como él se han mantenido muchos años en un sitial de importancia. Dos tangos como los mencionados nos lo ponen del lado bueno de la música por más que encontremos que durante su larga trayectoria se haya paseado por lugares no siempre bien aceptados por quién suscribe esto.
Un disco donde encontramos también “Que tango hay que cantar” o el del título, toda una declaración rioplatense, si se me permite.
Para finalizar, le compré este disco a Julia y por suerte cuando se fue a España me lo dejó.
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