Envidia (Tango)

Envidia
Por: Darío Valle Risoto

Voy a romper con a premisa de esta sección que se basa en compartir con ustedes las letras de aquellos tangos que forman parte de mi discoteca privada, este tango no lo tengo, es más, nunca lo escuché, al menos que recuerde, pero instado por el mensaje de un lector anónimo del blog a razón de mi artículo agradeciendo las 10.000 visitas, que me acusó de plagio absolutamente equivocado y tal vez mal intensionado porque confundió los enlaces a diferentes páginas con el robo de propiedad intelectual. Por lo tanto traté de buscar alguna letra de tango que explique una de las razones de su infértil ataque, sabía que de entre las innumerables letras de este estilo tan querido, encontraría una que explique la razón de su mensaje y creo que la encontré. Este amigo confunde enlaces con plagio y tal vez se siente abrumado por los números que en definitiva no dicen más que eso: Números.
Hace más de un año en mi blog de El Diccionario del Diablo alguien me denunció porque tenía "demasiadas visitas" y me quitaron unas cuatro mil de un plumazo, hace dos meses en este incorporé el contador y ya llegúe a este número que no dice nada, pero los mesquinos abundan buscando cosas raras en donde no existen. Así está el mundo amigos, a ellos les regalo esta letra.

ENVIDIA
Letra de Luis César Amadori
Musica de Francisco Canaro

Envidia, envidia siente el que sufre,
envidia siente el que espera
viendo que la vida entera
no es más que desilusión.
Envidia, envidia siente el cobarde,
envidia siente el que muere,
el que mata y el que hiere,
porque no tendrá perdón.
Envidia, envidia amarga y traidora,
envidia que grita y llora;
la que causa más dolor
es la envidia del amor.

Yo he nacido bueno,
yo he nacido honrado,
mi cabeza altiva
nunca se ha doblado.
Para el compañero
fue mi brazo amigo,
y estreché la mano
del que fue enemigo.

Nunca el triunfo del otro
me trajo una pena,
ni sentí amargura
por la dicha ajena;
y hoy, ante el espejo
cruel, de mi pasado,
veo qué cambiado
me tiene el rencor.

Envidia, envidia tengo en mi seno,
envidia del que a tu lado
es feliz por ser amado
mientras muerdo mi pasión.
Envidia, envidia de mis desvelos,
envidia, como el vencido,
porque jamás ha tenido
en la vida, una ilusión.
Envidia, envidia que me condena
a seguir con esta pena
porque no hay mayor dolor
que la envidia por amor.