Mística Punta del EstePor: Darío Valle Risoto
No fue difícil quedarse solo, tanto Diego como Efraín estaban en uno de esos días donde toda estupidez no era suficiente y Carlos se hartaba muy rápidamente de ellos.
Ya venían desde que salieron de su chalet alquilado metiéndose con cuanta mina caminaba por el balneario, era cierto, él necesitaba tanto como ellos tener una presencia femenina cerca pero no creía que esa fuera la forma.
___¡Adiós morocha! ¿Te doy unos masajes?
___¡Ándate a cagar pelotudo!
Era más que suficiente, no estaba nada conforme pero casi lo habían secuestrado con esa idea de que ver culos y tetas en plena playa de Punta del este ayudaba y mucho a su reciente separación.
Después de todo..., el verano pintaba bien y además Efraín los había llevado en el BMW de su padre, que casualmente había tomado prestado.
La playa Mansa brillaba en todo su esplendor, la suficiente música pop en el aire y un cortejo de pieles bronceadas, blanquitas, semi quemadas, el delirio de tres tipos acuciados por diferentes formas de hambre.
___¿Pueden tranquilizarse?, En cualquier momento un novio celoso nos va a patear el culo por sus bobadas.
Algunos tipos excedidos de bíceps les habían mirado mal y dado que los tres juntos apenas si completaban un ser humano normal no era cosa de hacerce los vivos.
Cuando Carlos amenazó con ponerse a llorar y largó un par de lágrimas los otros dos se fueron corriendo al agua salpicando y molestando a la gente mientras Efraín se sacaba el short y se zambullía mostrando sus nalgas blancas. Diego lo festejaba y Carlos se fue alejando hasta las dunas para tratar de mirar a lugares más sanos para su débil salud mental.
___¿Por qué me dejó? ___Pensaba, la pregunta lo tenía maniatado por los cojones desde Montevideo, Una simple llamada telefónica lo había tirado de cabeza a un pozo terrible de preguntas inciertas sobre su noviazgo con Teresa.
Una semana antes la había llamado porque habían quedado de ir a la feria Tristán Narvaja, le había contestado la madre que no estaba y que no sabía dónde, el resto del día comenzaban a amontonarse un montón de débiles estrategias para que no la vea y ni siquiera un mensaje de texto.
Al fin la débil voz de Teresa lo abandonó por teléfono. ___Conocí a alguien más ___Dijo
Tres horas después Diego y Efraín lo recogían borracho de un Bar de La Teja, felizmente el dueño los conocía a los tres y los había llamado. Fue embarazoso.
Fue embarazoso que lo bañaran con agua fría y lo arroparan como un niño en la casa de Diego y además junto a su cama intentaran darle ánimos.
___Ya se te va a pasar.
___Yo te dije que era una puta de mierda.
___No jodas bo, ¿Lo querés seguir lastimando?
___Pero si es cierto, yo no me la cargué primero cuando la conocimos en el cumpleaños de Marta sino... ahora.
___¿Ahora que?, Serías vos el pelotudo... mira como llora.
___¡Déjenme solo!
Volvió al presente y miró a sus amigos allá retozando en el agua, gritando y agitando los brazos con casi treinta años como dos reverendos.
___¿Tienes hora?
Esa mujer, de mediana estatura, de una piel inmensamente blanca lo miró, ella pelirroja, con un pareo blanco y un hermoso par de ojos azules.... Falta: Español con acento inglés.
___No, pero son como las ocho, va a anochecer pronto.
___Gracias. ___Comenzó a irse.
___¿Yanqui...?. digo: ¿norteamericana?
___Se me nota demasiado, lo sé, es un verdadero problema, pero las fotos no tienen mucha información sobre el acento y esas cosas.
___¿Qué?
Ella sonrió con unos dientes perfectos y ciertos rasgos orientales en la forma de sus ojos y algo inusitadamente atractivo en cada uno de sus movimientos caminando sobre la duna como si no pesara nada, sin darse cuenta comenzó a caminar junto a ella. La invitó a un refresco seguro de que se iba a rehusar.
Sus amigos quedaron atrás y seguramente ni se iban a dar cuenta de la ausencia de su vapuleado compañero de viaje.
El restaurante “Hell Beatch” cobra una coca cola como si tuviera oro líquido, pero ella entró allí.
___No te preocupes, yo voy a pagar, te vi antes, estabas triste.
___¿Qué?, Ah... si, me dejó mi novia.
___¿Tienes alguna foto de ella?
___¿Por?
Ella se quedó algo pensativa mientras le traían las cocas con unas graciosas sombrillas y cáscaras de limón que costarían un huevo y la mitad del otro.
Llevaba un bolso marrón de tela rústica, sacó una revista, en la cubierta había una foto de ella en plena playa de Río de Janeiro. “La modelo Top: Eva Furtado se casará con el cantante Narciso Ruedes el próximo 3 de Febrero”
___¡Sos una modelo internacional! ___Nadie se lo iba a creer cuando se lo cuente.
___En realidad no, necesitaba copiar a alguien que no sea de este lugar y encontré la revista y entonces tomé la imagen. ___Le señaló la publicación, dentro en una página interior estaba ella con exactamente la misma ropa.
___No entiendo un pito, menos mal que no pedimos alcohol.
Ella miró al techo, él también, los ventiladores no decían mucho.
___Creo que voy a tener que confiar en ti.
___Absolutamente. ___Le dijo el convencido de que no.
___¿Tienes fotos de tu ex?
___¿Para qué?, Esta, que me olvidé en el documento, bueno, solo me dejó hace unos días y...
La mujer que decía no ser esa modelo que se partía al medio de tan bella, le sacó la foto del porta documentos y se fue con ella al baño.
___Estas cosas solo me pasan a mí, debe de estar de cocaína en vez de coca cola, esta brasileña...
¿Cuántas posibilidades había de que Teresa su novia estuviera en ese momento en el baño del restaurante y saliera y lo mirara sonriendo mientras iba a sentarse con él?
Ella lo miró sonriendo.
___¿Que mierda hacés acá? ___Calor en torbellino en el estómago, sin saber si pegar, correr o enojarse, la pregunta y ella que lo tomó del brazo, vestida exactamente como en la foto que...
Y la misma voz con ese acento yanqui.
___Explícame como es la voz de tu novia, trataré de parecerme a ella.
___¡No puedo creerlo!, ¡Ahora caigo!
___No grites por favor. ___Los mozos le miraron como si fuera el mismo Richard Gere, unos momentos antes con una exuberante pelirroja y ahora con una morocha de largo pelo lacio y piel trigueña.
Carlos se rascó la cabeza, se había terminado la coca cola y menos mal que no era alcohol.
___Soy una mutante, una metamorfo, me llaman Mystique, vine al Uruguay luego de que me dejó mi pareja hace un tiempo.
___Entonces... ¿Podes transformarte en cualquier mujer que quieras?
___También en hombres.
___Gracias, por ahora no, y... ¿En que te puedo ayudar?
___Explícame como es la voz de Teresa.
No te preocupes, seguí con la tuya, después de todo en Punta del Este, nadie cree en los mutantes.
Ella sonrió y pidio un par de Martinis
Ya venían desde que salieron de su chalet alquilado metiéndose con cuanta mina caminaba por el balneario, era cierto, él necesitaba tanto como ellos tener una presencia femenina cerca pero no creía que esa fuera la forma.
___¡Adiós morocha! ¿Te doy unos masajes?
___¡Ándate a cagar pelotudo!
Era más que suficiente, no estaba nada conforme pero casi lo habían secuestrado con esa idea de que ver culos y tetas en plena playa de Punta del este ayudaba y mucho a su reciente separación.
Después de todo..., el verano pintaba bien y además Efraín los había llevado en el BMW de su padre, que casualmente había tomado prestado.
La playa Mansa brillaba en todo su esplendor, la suficiente música pop en el aire y un cortejo de pieles bronceadas, blanquitas, semi quemadas, el delirio de tres tipos acuciados por diferentes formas de hambre.
___¿Pueden tranquilizarse?, En cualquier momento un novio celoso nos va a patear el culo por sus bobadas.
Algunos tipos excedidos de bíceps les habían mirado mal y dado que los tres juntos apenas si completaban un ser humano normal no era cosa de hacerce los vivos.
Cuando Carlos amenazó con ponerse a llorar y largó un par de lágrimas los otros dos se fueron corriendo al agua salpicando y molestando a la gente mientras Efraín se sacaba el short y se zambullía mostrando sus nalgas blancas. Diego lo festejaba y Carlos se fue alejando hasta las dunas para tratar de mirar a lugares más sanos para su débil salud mental.
___¿Por qué me dejó? ___Pensaba, la pregunta lo tenía maniatado por los cojones desde Montevideo, Una simple llamada telefónica lo había tirado de cabeza a un pozo terrible de preguntas inciertas sobre su noviazgo con Teresa.
Una semana antes la había llamado porque habían quedado de ir a la feria Tristán Narvaja, le había contestado la madre que no estaba y que no sabía dónde, el resto del día comenzaban a amontonarse un montón de débiles estrategias para que no la vea y ni siquiera un mensaje de texto.
Al fin la débil voz de Teresa lo abandonó por teléfono. ___Conocí a alguien más ___Dijo
Tres horas después Diego y Efraín lo recogían borracho de un Bar de La Teja, felizmente el dueño los conocía a los tres y los había llamado. Fue embarazoso.
Fue embarazoso que lo bañaran con agua fría y lo arroparan como un niño en la casa de Diego y además junto a su cama intentaran darle ánimos.
___Ya se te va a pasar.
___Yo te dije que era una puta de mierda.
___No jodas bo, ¿Lo querés seguir lastimando?
___Pero si es cierto, yo no me la cargué primero cuando la conocimos en el cumpleaños de Marta sino... ahora.
___¿Ahora que?, Serías vos el pelotudo... mira como llora.
___¡Déjenme solo!
Volvió al presente y miró a sus amigos allá retozando en el agua, gritando y agitando los brazos con casi treinta años como dos reverendos.
___¿Tienes hora?
Esa mujer, de mediana estatura, de una piel inmensamente blanca lo miró, ella pelirroja, con un pareo blanco y un hermoso par de ojos azules.... Falta: Español con acento inglés.
___No, pero son como las ocho, va a anochecer pronto.
___Gracias. ___Comenzó a irse.
___¿Yanqui...?. digo: ¿norteamericana?
___Se me nota demasiado, lo sé, es un verdadero problema, pero las fotos no tienen mucha información sobre el acento y esas cosas.
___¿Qué?
Ella sonrió con unos dientes perfectos y ciertos rasgos orientales en la forma de sus ojos y algo inusitadamente atractivo en cada uno de sus movimientos caminando sobre la duna como si no pesara nada, sin darse cuenta comenzó a caminar junto a ella. La invitó a un refresco seguro de que se iba a rehusar.
Sus amigos quedaron atrás y seguramente ni se iban a dar cuenta de la ausencia de su vapuleado compañero de viaje.
El restaurante “Hell Beatch” cobra una coca cola como si tuviera oro líquido, pero ella entró allí.
___No te preocupes, yo voy a pagar, te vi antes, estabas triste.
___¿Qué?, Ah... si, me dejó mi novia.
___¿Tienes alguna foto de ella?
___¿Por?
Ella se quedó algo pensativa mientras le traían las cocas con unas graciosas sombrillas y cáscaras de limón que costarían un huevo y la mitad del otro.
Llevaba un bolso marrón de tela rústica, sacó una revista, en la cubierta había una foto de ella en plena playa de Río de Janeiro. “La modelo Top: Eva Furtado se casará con el cantante Narciso Ruedes el próximo 3 de Febrero”
___¡Sos una modelo internacional! ___Nadie se lo iba a creer cuando se lo cuente.
___En realidad no, necesitaba copiar a alguien que no sea de este lugar y encontré la revista y entonces tomé la imagen. ___Le señaló la publicación, dentro en una página interior estaba ella con exactamente la misma ropa.
___No entiendo un pito, menos mal que no pedimos alcohol.
Ella miró al techo, él también, los ventiladores no decían mucho.
___Creo que voy a tener que confiar en ti.
___Absolutamente. ___Le dijo el convencido de que no.
___¿Tienes fotos de tu ex?
___¿Para qué?, Esta, que me olvidé en el documento, bueno, solo me dejó hace unos días y...
La mujer que decía no ser esa modelo que se partía al medio de tan bella, le sacó la foto del porta documentos y se fue con ella al baño.
___Estas cosas solo me pasan a mí, debe de estar de cocaína en vez de coca cola, esta brasileña...
¿Cuántas posibilidades había de que Teresa su novia estuviera en ese momento en el baño del restaurante y saliera y lo mirara sonriendo mientras iba a sentarse con él?
Ella lo miró sonriendo.
___¿Que mierda hacés acá? ___Calor en torbellino en el estómago, sin saber si pegar, correr o enojarse, la pregunta y ella que lo tomó del brazo, vestida exactamente como en la foto que...
Y la misma voz con ese acento yanqui.
___Explícame como es la voz de tu novia, trataré de parecerme a ella.
___¡No puedo creerlo!, ¡Ahora caigo!
___No grites por favor. ___Los mozos le miraron como si fuera el mismo Richard Gere, unos momentos antes con una exuberante pelirroja y ahora con una morocha de largo pelo lacio y piel trigueña.
Carlos se rascó la cabeza, se había terminado la coca cola y menos mal que no era alcohol.
___Soy una mutante, una metamorfo, me llaman Mystique, vine al Uruguay luego de que me dejó mi pareja hace un tiempo.
___Entonces... ¿Podes transformarte en cualquier mujer que quieras?
___También en hombres.
___Gracias, por ahora no, y... ¿En que te puedo ayudar?
___Explícame como es la voz de Teresa.
No te preocupes, seguí con la tuya, después de todo en Punta del Este, nadie cree en los mutantes.
Ella sonrió y pidio un par de Martinis
FIN
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